Viajé a Brasil invitada por el Festival de Cultura Digital (culturadigital.org.br/) que tuvo lugar en Río de Janeiro de 2 al 4 de diciembre de 2012 en el MAM (Museo de Arte Moderno) y después me trasladé a la ciudad de Sao Paulo en donde participé del IV Congreso Fora do Eixo.


El Festival de Cultura Digital fue una actividad centrada en dar a conocer nuevos proyectos, experiencias y laboratorios relacionados con tecnología, periodismo, arte y activismo social. Allí participé de la sección “Experiencias” en la que tuve la oportunidad de presentar la campaña ¡Dominemos la tecnología! en formato de performance. A través de un monólogo escrito en base a experiencias que se fueron recopilando en el mapa de la campaña de 2011 con denuncias de casos de violencia a través de nuevas tecnologías, di a conocer el caso de una mujer ficticia que vive este tipo de acosos.


De esa manera uní la temática de violencia hacia las mujeres con la presentación de diferentes casos reales y utilicé algunas herramientas de Teatro del oprimido que buscan abrir un debate y un paso a la acción pero que además se vinculan con mi trabajo en una organización en Guatemala que busca la transformación social a través de esta herramienta artística. La recepción fue muy buena y la repercusión en Twitter entre los/as asistentes fue llamativa, según quienes organizaron el festival.


Encontré un debate muy rico respecto del uso de las TIC y su vínculo directo con las nuevas identidades sociales, las nuevas formas de hacer política y de crear redes en este país. A la vez encontré un lazo estrecho en la elaboración de políticas culturales mediadas por una lógica de trabajo en un entretejido social determinado por un vasto territorio que se vio beneficiado por un uso extenso de las TIC.


En tal sentido, la manifestación de una de las líneas de las políticas de Estado brasileño en la esferas de ciencia y tecnología durante las administraciones de Lula bajo el objetivo de promover acciones para la producción, distribución, apropiación y aplicación de conocimientos científicos, tecnológicos y la innovación como un instrumento de desarrollo social, económico y regional del país y como mecanismo para la inclusión digital por medio de procesos metodológicos participativos se evidenció durante gran parte de mi estadía en Brasil. Los discursos que circularon en estos eventos demostraban el empoderamiento, uso creativo y militante de las tecnologías de todas las personas convocadas.


No obstante, quizá por la falta de traducción de algunas conferencias y debates, no percibí tan claramente las posturas acerca de la situación de la brecha digital en ese país. Brasil, un país con más de 190 millones de habitantes cuenta, sin embargo, con una gran desigualdad respecto del acceso equitativo a internet. De acuerdo con un informe elaborado por la UIT en 2007, Brasil contaba con 3,5 abonados/as de banda ancha fija por cada cien habitantes. Para la banda ancha móvil, ese índice era de 1,2. Siendo estos indicadores extremamente inferiores a los de países de elevado nivel de desarrollo como Corea del Sur, que mostraba una penetración de banda ancha fija y móvil de 30,5 e 48,6 abonados/as por cada cien habitantes, respectivamente. Si se compara a países con el nivel de desarrollo equivalente al brasilero, el país no se destaca en su posición. En cuanto a la banda ancha y densidad de abonados/as es inferior a países como China, México y Argentina y en la banda ancha móvil Brasil es superado por naciones como Sudáfrica y Venezuela.


Fora Do Eixo, #Femeninas y redes en Brasil


En São Paulo del 11 al 18 de diciembre se realizó el IV Congresso Fora do Eixo, con más de 1500 congresistas, productores/as culturales e invitados/as. Fue una semana entera de debates para intercambiar ideas, debatir, aprender y proyectar sobre los distintos asuntos y problemáticas relacionados al arte y la cultura.


Fora do Eixo es una red colaborativa y descentralizada de trabajo constituida por colectivos de cultura diseminados por Brasil, basada en los principios de la economía solidaria, el cooperativismo, la divulgación, la formación e intercambio entre redes sociales, del respeto a la diversidad, la pluralidad y las identidades culturales.


Respecto de mi experiencia con Fora Do Eixo, puedo decir que fue para mí más una exploración que una presentación de contenidos de la campaña de @dominemoslastic. Los contactos con redes culturales y una sección de debate y convivencia llamada #Femeninas que cuenta Fora Do Eixo acerca de la experiencia de la mujer en este tipo de redes de conocimientos es fundamental para conectar con la posibilidad de pensar de manera crítica los usos de las TIC por las mujeres.


Una de las problemáticas más actuales es la ley AMP 557 que instituye el Sistema nacional de registro, vigilancia y acompañamiento de la gestante y puérpera para prevención de mortalidad materna. De acuerdo con la MP 557, que entró en vigor el 27 de diciembre este sistema tiene la "finalidad de garantizar la mejoría del acceso, de la cobertura y de la cualidad de atención a la salud materna, en particular para las gestaciones de riesgo". Sin embargo las organizaciones feministas brasileñas denuncian junto con Beatriz Galli, especialista en género y derechos humanos, que con esta ley la mujer pasa a ser vista como un receptáculo para el desarrollo de un nuevo ser. Viola la autonomía y la dignidad de las mujeres, negándoles el reconocimiento de la libertad de elegir. En contraparte, toma una clara posición pro-feto, ya que reconduce a la condición de incubadora.


Este, entre otros temas como la justicia socio-ambiental, ocuparon un importante lugar en los debates del Fórum Social Mundial temático en Porto Alegre, del 24 al 29 de enero, donde las redes y organizaciones de mujeres promoverán su incidencia política en el movimiento de la Cúpula de los Pueblos, que ocurrirá a mitad de año en el contexto de Rio +20, conferencia de las Naciones Unidas por el desarrollo sustentable.

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