1. Una tecnología sostenible y responsable es posible

¿Ha pensado en dejar de utilizar la tecnología? Imagine vivir unos cuántos años atrás sin teléfonos inteligentes, sin Internet y sin redes sociales. Lo más probable es que la idea suene inconcebible y sí, la tecnología se ha vuelto parte vital de la cotidianidad en sus diferentes expresiones. Pero ¿cuál es el precio que se paga por su uso? No, no en términos del costo que tiene un plan de datos sino al impacto medio ambiental que genera. En muchas situaciones, la relación entre la tecnología y la naturaleza ha sido tensa y destructiva. Algunos ejemplos sobre cómo la tecnología contribuye al deterioro del entorno son la explotación de recursos naturales, la contaminación del aire y agua y la proliferación de residuos electrónicos. Para reducir los efectos se debe comenzar a analizar alternativas que permitan una convergencia entre la evolución informática y el hábitat natural. Para que las tecnologías puedan coexistir con el medio ambiente es necesario cambiar la manera en que son implementadas.

Las consideraciones técnicas para implementar la tecnología no abarcan reflexiones de cuidado ambiental

La implementación de la tecnología ha experimentado un crecimiento exponencial en las últimas décadas, impulsada principalmente por factores como la eficiencia, el rendimiento y la seguridad. No obstante, en la mayoría de los casos, las consideraciones técnicas tradicionales no han incorporado adecuadamente el cuidado ambiental en su diseño y ejecución. Esta falta de atención al medio ambiente plantea un desafío importante en la búsqueda de una coexistencia armoniosa de la tecnología con la vida.

El agotamiento de recursos naturales, la generación de residuos electrónicos y un aumento en las emisiones de gases de efecto invernadero son los resultados de esta des-conexión entre la tecnología y el medio ambiente, lo que ha resultado en una huella ecológica cada vez mayor. Partiendo de algunas preguntas básicas se puede repensar este relación entre tecnologías digitales e impacto ambiental,

Pero qué tipo de recursos naturales se usan y cómo:

• Energía: Para que los servidores y la infraestructura tecnológica en general funcionen correctamente, se necesita una cantidad significativa de energía. Esto incluye la electricidad que se necesita para alimentar los servidores y la que se usa para refrigerar los centros de datos. Por ejemplo, el consumo de un servidor de alta demanda es de 200 vatios hora (Wh), considerando que funciona todos los días de un año y todas las horas del día, su consumo sería de 1800 KWh aproximadamente. Esto se traduce en 525 Kg de emisiones de carbono.[1]
• Agua: La refrigeración de centros de datos y servidores con frecuencia requiere agua para disipar el calor producido. Esto es especialmente importante en lugares donde hay una alta densidad de centros de datos. En el uso de la web se estima que se gastan unos 200 litros de agua cada vez que se descarga un gigabyte de datos.[2]
• Materiales: Una variedad de materiales se extraen y se utilizan en la fabricación de servidores y componentes tecnológicos, algunos de los cuales son recursos no renovables. Esto incluye materiales como el cobre, el oro y otros que se utilizan para fabricar chips y placas de circuito.[3]
• Residuos electrónicos: Cuando los dispositivos y equipos llegan al fin de su vida útil, la infraestructura tecnológica genera grandes cantidades de residuos electrónicos. La gestión de estos desechos presenta dificultades en cuanto al reciclaje y disposición responsable. Una solución rápida y lógica esta en la reutilización de dispositivos, para lo cual ya hay procedimientos.[4]

Estas son consideraciones que son vistas desde el costo de mantener funcional un servidor web, la velocidad y eficiencia con la que va a responder a las demandas y el retorno de la inversión que llegaría a significar. Como parte del desarrollo e implementación de tecnología, se debería incluir las preocupaciones por los términos del cuidado.

Al implementar sistemas informáticos se debería considerar el uso de tecnologías limpias

La instalación de sistemas informáticos requiere una gran cantidad de recursos y energía, especialmente en el contexto de centros de datos y redes de comunicación. Es esencial considerar el uso de tecnologías limpias en estas implementaciones si se busca una coexistencia sostenible entre la tecnología y el medio ambiente.

Las fuentes de energía renovable como la solar, eólica e hidroeléctrica pueden reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y también pueden reducir los costos operativos en el futuro. Para optimizar el rendimiento y minimizar el desperdicio de recursos, también es importante utilizar prácticas de conservación de energía como la virtualización de servidores y la gestión eficiente de la carga de trabajo. Por ejemplo, la virtualización de servidores permite consolidar numerosos servidores virtuales en un solo servidor físico, lo que reduce la necesidad de hardware adicional y, por lo tanto, el uso de energía [5][6].

La elección de materiales y componentes es crucial para el desarrollo de tecnologías limpias. Esto no solo disminuye el impacto ambiental durante el proceso de fabricación, sino que también facilita el reciclaje y la reutilización de los componentes cuando estos se agotan.

¿Cuáles podrían ser consideraciones de tecnologías limpias a tener en cuenta?[7]

• Almacenamiento de Energía Avanzado: Las baterías de estado sólido y de flujo de vanadio son tecnologías de almacenamiento de energía más avanzadas que son más eficientes y respetuosas con el medio ambiente.
• Tecnologías de Captura de Carbono: los avances en las tecnologías de captura y almacenamiento de carbono (CAC) han permitido que las emisiones de CO2 de las plantas de energía y las instalaciones industriales sean más bajas. Una innovación en este campo es la captura de carbono directa del aire (DAC).
• Energía Eólica Offshore: Las turbinas eólicas offshore (en alta mar) son más grandes y eficientes. Para generar energía renovable, estas instalaciones aprovechan los vientos del mar más constantes y fuertes.
• Energía Solar Fotovoltaica de Tercera Generación: Las células solares orgánicas y de perovskita, entre otras tecnologías, han avanzado y prometen mejorar la eficiencia y reducir los costos de la energía solar.
• Tecnologías de desalinización energéticamente eficientes: el uso de métodos de recuperación de energía y tecnologías de ósmosis inversa ha favoreciendo la eficiencia energética de la desalinización del agua de mar.
• Tecnologías de Reciclaje Avanzado: Para reducir la necesidad de extraer recursos naturales, se están desarrollando tecnologías de reciclaje avanzadas, como la química de recuperación, para recuperar materiales valiosos de productos desechados.

Tecnologías digitales desde los cuidados

Es esencial comprender que esta tecnología fue creada por una parte de la humanidad para mejorar la calidad de vida de las personas y aumentar la eficiencia en muchas áreas de la sociedad. En este contexto, el cuidado ambiental y social debe estar en el centro de los procesos de desarrollo e implementación tecnológica.

El avance tecnológico debería ir más allá de la mera maximización de la eficiencia y el beneficio económico. Debido a que las tecnologías tienen un impacto significativo en la vida de las personas y en el entorno en el que operan, es esencial que las personas dedicadas al diseño y desarrollo tengan en cuenta la sostenibilidad ambiental y el bienestar humano desde el principio y con proyección a largo plazo.

Este enfoque se traduce en cómo las tecnologías pueden mejorar la calidad de vida, aumentar la inclusión y reducir las desigualdades. Además, se refleja en la preocupación por la seguridad y la privacidad de los usuarios y usuarias, evitando riesgos innecesarios y protegiendo los datos personales. La tecnología puede ser esencial para la atención médica y el bienestar humano, pero solo si se desarrolla de manera responsable y ética, teniendo en cuenta la dignidad y el respeto de quienes la utilizan.

Pero además de eso, debe estar pensada desde el punto de vista de la coexistencia y la responsabilidad medioambiental. Es decir, no basta con una tecnología ética con la existencia humana sino lo es con la vida en todos los aspectos.[8]

El cuidado no tiene costo, pero su valor es incalculable

En el contexto de la implementación de tecnología sostenible y responsable, el cuidado es un principio fundamental y valioso. Su impacto en la calidad de vida de las personas y en la preservación del medio ambiente es incalculable, aunque puede no tener un costo monetario directo.

En términos de factores ambientales y sociales, el cuidado no siempre se traduce en gastos adicionales significativos. En cambio, requiere una mentalidad responsable y comprometida con la sostenibilidad. Por ejemplo, usar materiales reciclables en lugar de materiales no sostenibles puede no aumentar considerablemente los costos de producción, pero puede reducir los desechos y la conservación de los recursos naturales.

La preservación de ecosistemas, la mitigación del cambio climático y la promoción de una sociedad más inclusiva son ejemplos del incalculable valor del cuidado. Al considerar cuidadosamente el impacto de la tecnología en el medio ambiente y en la sociedad, se pueden evitar efectos negativos a largo plazo que, de otra manera, serían costosos de remediar.[9]

La tecnología como herramienta de mejora y aliada

La convergencia entre tecnología y medio ambiente es un privilegio porque nos brinda herramientas y conocimientos para abordar de manera más efectiva los desafíos ambientales. La tecnología nos permite comprender y reducir los efectos negativos en el medio ambiente en áreas como la monitorización ambiental y la gestión de recursos naturales.

La capacidad de desarrollar soluciones tecnológicas innovadoras que aborden problemas ambientales, como la reducción de emisiones de carbono o la conservación de la biodiversidad, son ejemplos de como usar las invenciones al servicio de la vida.

Se puede impulsar un cambio positivo en la forma en que se desarrollan y utilizan las tecnologías al abrazar este propósito. Esto conduce a prácticas más limpias, educación ambiental y defensa de políticas sostenibles.[10][11]

Conclusión

En un mundo donde los avances tecnológicos se están produciendo rápidamente, es necesario reconsiderar cómo utilizamos la tecnología. Los argumentos presentados intentan mostrar la importancia de centrarse en la implementación de tecnología sostenible y responsable, reconociendo que el medio ambiente y la tecnología están intrínsecamente relacionados.

Las preocupaciones ambientales tienden a pasar por alto las consideraciones técnicas tradicionales en la implementación de tecnología, siendo este uno de los puntos iniciales por los que se puede proponer un cambio. La creciente huella ecológica pone de manifiesto la urgente necesidad de cambiar la forma en la que se implementa tecnología y como coexiste con ella.

Para reducir el impacto ambiental de la tecnología, es necesario adoptar tecnologías limpias, como energía renovable y prácticas de conservación de la misma. Además, no se debe olvidar que las tecnologías se crean para personas y es esencial tener en cuenta el cuidado, la moralidad y la inclusión en todas las etapas del proceso.

Aunque no tiene un costo directo, el cuidado tiene un impacto significativo en la calidad de vida de las personas y la preservación ambiental. Especialmente, este es un trabajo multisectorial y que llama a la acción a todas las personas en diferentes grados de responsabilidad pero en igual compromiso.